11 de abril de 2002: El golpe de estado de la derecha fascista venezolana.

   Con el apoyo de los medios de comunicación masivos la derecha fascista venezolana lanza lo que ellos consideraban era el asalto definitivo para derrocar al gobierno democrático del Comandante Hugo Chavez, para ello contaron con sectores de la oficialidad de las fuerzas armadas, de modo particular del alto mando militar. El evento constituyo la culminación de un ataque sistemático a la estabilidad política de la nación, la manipulación mediática alcanzo niveles de paranoia, se realizó una convocatoria en Chuao en donde sus organizadores de manera irresponsable ordenaron marchar hacia Miraflores donde estaba congregada una multitud de personas en apoyo al gobierno revolucionario, la intención era clara utilizar a su propia gente como carne de cañón para justicar la salida violenta de Hugo Chavez del poder, luego los eventos se precipitaron y esa noche el presidente estrategicamente  se entrega a los golpistas para evitar un derramamiento de sangre. Ya han pasado catorce años desde ese día nefasto para la democracia venezolana, pero sigue siendo una fecha que invita a la reflexión y a la conciencia, las ansias de poder de una derecha sin escrúpulos quedaron de manifiesto siendo capaces de masacrar a sus propios partidarios con tal de lograr sus objetivos.